Con la llegada del nuevo milenio, los Rothschild decidieron crear el símbolo de su trabajo y los valores de su espíritu a través del sector vitivinícola más prestigioso del mundo, el champán.

El Blanc de Blancs Barons de Rothschild afirma su delicadeza al ensamblar los mejores Chardonnay de Champagne después de al menos 3 años de envejecimiento en la bodega.

Modelo de equilibrio donde la pureza y el brillo realzan este champagne excepcional.

Cada Champagne Barons de Rothschild tiene las características excepcionales que los sitúan en el grupo de los Grandes Champagnes envejecidos en bodega.

Dotado de un brillo inimitable, delicadas burbujas acompañadas de luminosos reflejos dorados, revela en nariz notas de fruta fresca y cítricos maduros. Las bajísimas dosificaciones de este vino y su larga crianza tras el "dégorgement" (6 a 9 meses) le confieren una madurez donde el chardonnay puede desarrollar toda su autenticidad y pureza, que podemos apreciar en cualquier momento del día.

• El Arte del Champagne Barons de Rothschild Blanc de Blancs :

Redescubrimos, en esta cuvée pura, delicada y compleja, la orientación que toma la Familia Rothschild en la elaboración de sus vinos: la preocupación por la perfección, la constancia, con un espíritu refinado y la excelencia que son objeto de la mayor atención. Emblema que caracteriza a la Maison Barons de Rothschild, Chardonnay firma aquí el estilo refinado y audaz que caracteriza la pasión de la Familia Rothschild por esta variedad de uva en Champagne.

• El arte de ensamblar:

Esta cuvée basada exclusivamente en Chardonnays proviene de los principales Crus de la Côte des Blancs: Avize, Cramant, Mesnil-sur-Oger, Oger et Vertus. Los vinos de reserva comprenden alrededor del 40% de la composición, una marca excepcional de calidad y regularidad de Maison Barons de Rothschild, que tiene así la extrema capacidad de recomponer un ensamblaje constante cada año.

• El Arte de Degustar:

En Boca: El ataque en boca es preciso, limpio, seguido de una sedosa frescura apoyada por notas de cítricos y frutas de pulpa blanca. La sensación cremosa de las finas burbujas grabadas se asocia a un dulzor mineral y persistente.

A la Vista: Blanc de Blancs se distingue por su capa cristalina de color amarillo dorado que desvela una fina espuma y un cordón persistente con delicadas burbujas.

En Nariz: El chardonnay se destaca particularmente en esta cuvée con sus aromas de rara intensidad y pureza. La nariz, dominada por los cítricos, se mezcla con notas aromáticas de almendras frescas y frutos secos.

• Gastronomía y Vinos:

Este gran Champagne será apreciado como aperitivo en todas las estaciones y más particularmente en el período de verano acompañado de mariscos.
En la mesa, el Blanc de Blancs acompaña a la perfección con un soufflé de bogavante, un carpaccio de Saint-Jacques o un carpaccio de bogavante ligeramente sazonado con limón.
Continúe disfrutando de esta cuvée con lubina a la parrilla y termine asombrado con una tarta de limón.